domingo, 29 de mayo de 2011

Importancia de pensar críticamente


El pensamiento crítico es una habilidad que los seres humanos, los cuales tenemos un cerebro más complejo que los demás animales, podemos desarrollar. Éste se basa en gestar diversas destrezas cognoscitivas (interpretación, análisis, explicación, inferencia, entre otro) para que finalmente converjan entre sí, e intentar dejar fuera los diferentes sesgos que se puedan presentar. Logrando lo anterior, se puede generar esta “gran habilidad compuesta”, que como dice Facione (2007) “tiene un propósito”, es decir, tiene una finalidad, un objetivo que es lo que motiva su nacimiento.
Sin embargo, a mi parecer, este tipo de pensamiento no está masificado, por lo cual aún el pensamiento vulgar es el que impera a la hora de generar una posición frente a los actos e ideales que se nos presentan. Las creencias, la cultura, las influencias y una posición poco escéptica, en reiteradas ocasiones, nos estancan frente al desarrollo del pensamiento crítico, no porque sean erróneas, sino porque muchas veces puede que no se manejen de la mejor manera y se llegue a caer en el fanatismo, que como lo define la Real Academia Española (2010) fanático sería alguien “Preocupado o entusiasmado ciegamente por algo”, lo que nos cierra los ojos ante otros puntos de vistas.
Dentro de éste ensayo se tendrá como objetivo describir en que consiste el pensamiento crítico, exponer algunas razones que apoyen el porqué de la importancia de su desarrollo en conjunto de algunas consecuencias que se nos pueden presentar ante su ausencia de uso. Todo esto a través del análisis de algunos libros, artículos y diversas publicaciones, y de la bien fundamentada argumentación con respecto a lo planteado, para una mayor claridad para el entendimiento del lector.
La relevancia del tema, radica, como exponen Argudín & Luna (2010) en que el desarrollo de un pensamiento crítico puede llevar a una mayor comprensión que logre el nacimiento de argumentaciones más sustentadas, con bases sólidas y sin ambigüedad, además yo creo que éste pensamiento nos conduce a un constante cuestionamiento dentro de nuestra realidad, pudiendo buscar, quizás, respuestas más certeras o pudiendo llegar a diversas opciones de éstas.
Con todo esto, podríamos preguntarnos ¿Qué es el pensamiento crítico y por qué es de tanta importancia desarrollarlo en la actualidad?, y bajo esta premisa es que comenzaré a profundizar en este cuestionamiento.

Primero que todo, como cita Hawes (2003) en su investigación a Scriven & Paul (2003) el pensamiento crítico es “el proceso intelectualmente disciplinado de conceptualizar, aplicar, analizar, sintetizar y/o evaluar, de manera activa y diestra, información reunida de, o generada por, la experiencia, reflexión, razonamiento o comunicación, como guía para la creencia y la acción”, estos nos dice, que como planteamos al inicio del ensayo, el pensamiento crítico es compuesto por una serie de habilidades cognoscitivas que se deben ir desarrollando a lo largo de nuestro crecimiento, para después no sólo poder retener la información, sino que ir más allá con ella, y así utilizar estas habilidades en nuestra vida cotidiana y actuar, de una manera mucho más activa.
Con esto, lo que yo intento plantear, es que la utilización del pensamiento crítico, a mi parecer, nos sirve día a día para nuestro desenvolvimiento en la sociedad, para que nuestro pensar y accionar sea autónomo, realizado por un convencimiento propio y no exterior. Por ello aquí explicitaré algunas razones del porqué de la importancia, según mi juicio, del desarrollo del pensamiento crítico.
Primero que todo, hoy en día, como expone Aguilar (2000) hemos ido perdiendo nuestra capacidad de criticar, estamos con una actitud de aceptación ante todo lo que nos dicen, pues cuestionarnos se nos hace complejo, y preferimos convertirnos en receptores pasivos, siendo uno más dentro de la masa homogénea. Yo, sinceramente estoy bastante de acuerdo con lo que ella postula, pues, a mi parecer, es así como funcionamos hoy en día, porque vamos en busca de nuestra comodidad, y ya nadie, al parecer, quiere “perder su tiempo” cuestionándose.
De hecho, sobre esta carencia del pensamiento crítico se obtuvieron algunos datos duros que nos presenta Montoya (2007) “el 90% de los alumnos de la Enseñanza Secundaria obligatoria (E.S.O.) en España no utilizaban el pensamiento crítico ni en el colegio ni en su vida diaria. En Estados Unidos el 78 % de las mujeres y el 70 % de los hombres leen el horóscopo creyendo que han sido escritos para ellos, y el 99% de los alumnos cree en cosas que no pueden ser verificadas como los fantasmas, la telepatía, el triángulo de las Bermudas.”.

Sin embargo esta actitud más ligada a la pasividad, nos muestra una actitud muy poco escéptica, y además nos podría llevar a una disminución de nuestras habilidades cognoscitivas, al no utilizarlas constantemente, lo cual en un futuro degeneraría nuestra comprensión, y nos acarrearía, como plantea Montoya (2007) problemas para estructurar, dificultad en destrezas como observar, comparar, agrupar, entre otros, como también nos produciría trabas a la hora de identificar temáticas, en otros. La carencia de práctica del pensamiento podría gestar estas consecuencias. He aquí encontrado una primera razón del porqué de la importancia del pensamiento crítico.
Pero también debemos considerar nuestro contexto, donde la revolución tecnológica de los últimos años nos ha abierto grandes puertas para informarnos, y hay un bombardeo constante de ésta información que nos llega. Al desarrollar nuestro pensamiento crítico podemos ser capaces de discriminar entre las informaciones, ya que no todas tienen igual validez, por lo que, según lo que yo pienso, nuestras habilidades cognoscitivas nos llevarán por un camino más idóneo, y que al no utilizarlas, éste mucho más pedregoso. Por lo tanto, como dice Kurland (2005) “El pensamiento crítico implica reflexionar sobre la validez de lo que se ha leído a la luz del conocimiento y la comprensión del mundo que previamente se tiene”, y con esto se puede evaluar con mayor exactitud y escepticismo las afirmaciones que se presenten en la información. Está podría ser una segunda gran razón por lo que yo creo que se tildaría de importante al pensamiento crítico.
Y finalmente, desde una postura bastante personal, yo expongo que el pensamiento crítico nos lleva a una mayor autonomía con respecto a nuestra libertad de acción y pensamiento. Ya que al lograr el desarrollo de éste, podríamos formular opiniones y/o argumentaciones mucho más potentes, que avalarían nuestro comportamiento. El “porque sí”, estaría completamente fuera de nuestro diccionario, porque ya no necesitaríamos ese mecanismo de defensa ante, muchas veces, la ignorancia, y tendríamos una disposición mucho más curiosa ante lo que se nos presenta. Esta es la tercera y última razón del porqué yo creo que es de gran importancia desarrollar el pensamiento crítico.
Con todo lo anterior, podría resumir que éste tipo de pensamiento, para mí entender, es una habilidad, compuesta de múltiples destrezas cognoscitivas que además deben ser utilizadas para nuestra vida, creencias y accionar. Ya que nos ayudaría a desarrollar una mayor comprensión respecto a nuestro alrededor y uno mismo. Además su no utilización nos podría conducir a una degeneración de tales destrezas, y quizás, a una incapacidad de desarrollarnos de manera plena en nuestro ambiente.
Además es de considerar que en la actualidad hay tanta información, que según lo que creo, tener pensamiento crítico puede llevar a evitar que “nos metan el dedo en la boca”, y poder, a través de nuestros propios medios, decidir en que creer, que pensar, y cómo actuar, sin que otros sean los que decidan por nosotros.
Sin embargo, vale destacar que para el desarrollo de éste ensayo se me presentaron algunas limitaciones, tales como mucha información en otro idioma, poco comprensible para quien no lo maneja, además del tiempo que nos limita el nivel de profundización de la información, debido que la información de más rápido alcance, no como cuando se hace una investigación en profundidad de meses, la mayoría de las veces era bastante general. No obstante, se ha podido dejar en claro, a grandes rasgos, algunas de las razones que, a mi parecer, podrían explicar éste pensamiento y su significancia.

Pero aún queda mucho por averiguar, recónditos subtemas que abarcan el pensamiento crítico y sus derivados, que nos podría llevar al descubrimiento de múltiples razones de su importancia, o también el ahondar en otro ámbitos de éste mismo, como la distinción entre un pensador crítico y un buen pensador crítico, o tal vez el preguntarnos ¿Cómo reconocerlos? ¿Quiénes han sido los grandes pensadores en la historia y por qué? ¿Hay ética en el pensamiento crítico? ¿A lo largo de los años se ha disminuido su utilización, o nunca se ha masificado?

En fin, esto no termina aquí, pues el tema tiene variadas aristas que uno puede tomar, en post de una mayor profundización del tema, y es la invitación que les hago, no nos quedemos con una sola fuente de información, seamos curiosos en busca de diversos puntos de vista, y no tengamos miedo de exponer nuestro pensamiento, opinión o actuar, cuando éste tiene bases sólidas para respaldarse.






Referencias:

Aguilar, M. (2000). Creatividad, Pensamiento Crítico y Valores: Una Mirada Diferente en la Educación. México: Magistrales.

Argudín, Y. & Luna, M. (2010) Atrévete a Pensar: Desarrollo del pensamiento crítico por medio de la lectura crítica. México: Trillas.

Facione, P. (2007). Pensamiento Crítico: ¿Qué es y por qué es importante?. California Academic Press. Recuperado de http://maestriagp.web.officelive.com/Documents/Pensamiento%20 Critico% 20Facione.pdf

Hawes, G. (2003). Pensamiento Crítico en la Formación Universitaria. Talca, Chile: Instituto de Investigación y Desarrollo Educacional de la Universidad de Talca

Kurland, D. (2005). Lectura Crítica versus Pensamiento Crítico. Ediciones Simbióticas. Recuperado de http://www.edicionessimbioticas.info/Lectura-critica-versus-pensamiento

Montoya, J. (2007). Acercamiento al Desarrollo del Pensamiento Crítico, Un Reto para la Educación Actual. Fundación Universitaria Católica del Norte. Recuperado de: http://201.234.71.135/portal/uzine/volumen21/articulos/1_investigaci%C3%B3n_pensami ento_cr%C3%ADtico.pdf

Real Academia Española (2010). Diccionario de la Lengua Española. Recuperado de http://buscon.rae.es/draeI/SrvltConsulta?TIPO_BUS=3&LEMA=cultura

martes, 3 de mayo de 2011

La sociología ¿Qué es?



La sociología podría decirse que es una ciencia que estudia el comportamiento humano en sociedad, sin embargo cuando hablamos de ciencia se debe dejar en claro que esto se debe a su metodología sistemática a través de la investigación empírica, análisis de datos, formulaciones lógicas, y demás. Pero en cuanto a su objeto de estudio no es comparable con los de las ciencias naturales, debido a la complejidad del de la sociología; los seres humanos, con sus constantes cambios, sus capacidades de autoconocimiento y autocontrol, que pone al sociólogo ante una situación mucho menos manejable que en el caso de otros científicos que pueden dominar con mayor facilidad su objeto.

También debe considerarse que ésta disciplina surge ante la necesidades de mayor comprensión presente y si es posible, un mayor conocimiento del futuro ante la instauración de nuevos sistemas industriales modernizados, los cuales producen un cambio radical en la forma de vida de estas sociedades.

Los sociologos más destacados de esta disciplina, se complementan unos con otros, siempre profundizando más con respecto a lo que a ellos les importa, que es el desarrollo de la sociedad, lo que nos deja ver a la sociología como una ciencia acumulativa del conocimiento. Todos hablan y analizan este cambio social que se produce, pero desde diferentes perspectivas, por ejemplo Comte desde una mirada evolucionista y positivista basado en la dinámica social, Durkheim a través del estudio de los hechos sociales como cosas y del desarrollo de la división del trabajo, Marx desde las influencias económicas en la sociedad y finalmente Weber desde la compresión de lo que hay antes del actuar de las personas.

También se nos presentan autores más contemporáneos que siguen ahondando en sociología como Foucault y Habermas, el primero yendo a temas quizás más de la cotidianeidad y a nivel más micro, pero no por esto menos importante, y el segundo diciendo que el crecimiento económico nos lleva a un cada vez más sinsentido de la vida, un pensamiento por cierto, bastante marxista.

A pesar de estas miradas, que podríamos decir que se encuentran muy distantes unas con otras, van a lo mismo, a esta comprensión, el explicar y, quizás, poder generar cambios, al como un sistema nos afecta social e individualmente, y como reaccionamos y/o nos sometemos.
En conclusión todos van hacia un fin igual con pequeñas variaciones, pero lo que cambia es el foco, aunque no hay que dejar de dar a conocer que Comte y Marx son los que cimentan las bases de la sociología, para luego ser más desarrollados por Durkheim y Weber y finalmente en la actualidad, Foucault y Habermas encontrarse profundizando más sobre estos temas clásicos, lo que a lo largo de la historia los une.

De la actividad a la pasividad








A lo largo de los años, los estudiantes universitarios se han desenvuelto de diversas maneras según su contexto histórico, con lo que nos hemos podido percatar de una evolución o involución que ha surgido con respecto al ser universitario en Chile, pues este rol es completamente distinto hoy en día a lo que era hace pocos años atrás, siendo hoy el universitario un agente muy pasivo en la sociedad en comparación con sus antecesores, que puede ser explicado por diversos factores que lo afectan.

Por lo tanto es a través de este ensayo, que se quiere ahondar en este cambio, a favor de descubrir antecedentes y razones del porqué, describir las motivaciones de los estudiantes universitarios de hoy en día, conocer el contexto histórico de los universitarios de antes y los contemporáneos, y así poder dar a conocer la base de esta permutación. Todo esto a través de una investigación del contexto histórico del país, recopilación de información, y el desarrollo de opinión propia para generar nuevas visiones acerca del tema.

Abordar este tema debiera ser de interés de todo universitario, el conocer el cambio generacional y las consecuencias que trae consigo es de suma importancia para lograr un desarrollo más óptimo y concientizarse de que no todos los cambios son buenos, y que hay cosas del pasado que se debieran retomar para una mayor activación de los actores universitarios del hoy en día, y no me refiero a activación en el sentido de movimientos estudiantiles masivos, sino que al del día a día, a esa curiosidad del estudiante, su capacidad de ir más allá de lo visto en clases y de lo dado por el docente. Por lo mismo ¿Por qué los universitarios de hoy en día han tomado esta posición más pasiva ante el aprendizaje y la vida universitaria?

Hace algunos años atrás el estudiante universitario era una persona de estatus, no cualquiera podía acceder a tal beneficio, no sólo por temas económicos, pues igualmente personas de escasos recursos podían ser parte de la vida universitaria, sino también por temas de intelecto, el universitario era un personaje con sed de descubrimiento y conocimiento, ahondando en la pincelada de temas que le presentaban en las aulas de la universidad, era capaz de enfrentar y contradecir al docente porque tenía material y argumentación para hacerlo, se encontraba en un constate aprendizaje, aprehendía los conocimientos, los incorporaba a su vida. En resumidas cuentas estaba siempre en auto formación.

Sin embargo, hoy en día no es igual, el entrar a la universidad ya es casi una obligación, al que se tiene acceso sin importar el intelecto que se posea, pues hay universidad o instituto para todo ser y todo lo que desee tal ser. Por lo mismo, muchos llegan sin una claridad acerca de lo que están haciendo, y de que están forjando su futuro. Esto lleva a una pasividad de los estudiantes ante este poco conocimiento de su hacer, quedándose muchas veces con lo visto en clases y los textos básicos dados, generando muy poca discusión y retroalimentación en el aula,pues no se tienen argumentaciones firmes para poder enfrentar el conocimiento del docente.

Pero ¿a qué se debió tan radical cambio? Y eso es lo que intento esclarecer. A lo largo de la historia universitaria, el estudiante ha tenido que vivir grandes cambios, en un principio él no tenía ninguna influencia sobre la institución, pero con el paso del tiempo, y ante esta tan poco democrática manera de hacer universidad, los estudiantes se activaron para dar paso a una reforma que cambiaría la historia universitaria, logrando mayor participación de éstos, modernización, y democratización, llegando en algún momento, las universidades, a convertirse, como dicen Bernasconi y Rojas “en una suerte de versión concentrada de los conflictos políticos y sociales del país” (p.19) pero ya para 1973, con el golpe de estado, todo lo logrado por la reforma se derrumbó ante sus pies, volviendo a la antidemocracia anterior, borrando del mapa a algunas carreras, negando el pluralismo que fue alcanzado anteriormente y dejando fuera de su formación a muchos estudiantes . Luego en 1980 comienza el proceso de privatización de la educación, y de mucha otras cosas, con lo que, como dice Espinoza (2005), los servicios empiezan a verse como “comodidades”, administradas y producidas por privados, donde nacen nuevas universidades privadas que vuelven a generar más cupos, y con esto empiezan las competencias entre instituciones, donde se pierde mucho de universidad y se transforman más en empresas.

Con todo este hacer y deshacer por otros, en las formas de organización de las universidades, es claro que llevan a un cambio en los estudiantes a nivel personal. Tanta lucha por una democratización genera un mayor compromiso a nivel académico, pues son parte fundamental dentro de la institución, tienen derecho a voto, son personajes con peso social que no pueden decaer, pero tras tal derrumbe de sus logros, se manifiesta una gran desilusión, al verse con tan poca validez ante la institución. Ya no se toma el mismo peso a los estudios como lo era en el pasado, ahora se es un número más dentro de muchos.

Además se debe profundizar en el tema de la accesibilidad de la educación superior hoy en día, antes el que entraba a la universidad era el orgullo de la familia, o el intelectual con gran vocación sobre la carrera escogida, en cambio, hoy en día es una paso más dentro de nuestra educación, si queremos surgir necesitamos de un título, y con la amplia gama de universidades tenemos a donde entrar, con esto se suma el hecho de que terminando el colegio ya debes saber a qué te quieres dedicar en el futuro, lo que lleva que el estudiante muchas veces se equivoque, lo que genera la deserción estudiantil en las carreras universitarias en la actualidad.

Todos estos pasos tan acelerados de la sociedad de hoy , conllevan a errores, o sentimiento de obligación al estudio para responder a la familia, por lo tanto, ahora el estar estudiando una carrera no significa que sea la verdadera vocación, muchas veces es por surgir, o para cumplir con los padres, y gracias a esto se genera esta pasividad, pues ya la universidad se ve como un “colegio con mayor dificultad”, no todos los estudiantes toman con la misma seriedad el sacar una carrera, y al muchas veces, no ser la vocación de la persona, tampoco se generará un interés en ahondar más aún en el conocimiento, para generar una visión crítica frente a lo que se estudia.

Ahora debe tomarse en cuenta que esta visión no va en contra de la mayor accesibilidad que se ha generado en torno a la educación superior, sino que es un análisis con el cual se busca una relación entre los hechos contextuales con la actividad o pasividad estudiantil, pues hoy en día cuando un estudiante está realmente motivado por lo que estudia, se hace notar entre sus compañeros por su mayor conocimiento, pero lamentablemente, aquellos son muy pocos.

Quizás lo que sucede, es que hay una poca valoración ante la entrega de esta educación, al ser vista como un paso que uno debe cumplir dentro de su vida, como expone Patricia Pérez (2011)“ La vida universitaria es una etapa más dentro del ciclo vital de la persona”(p.85), y no como un paso que te hará crecer y forjar un mejor y más óptimo camino hacia el futuro.

En fin de cuentas podemos percatarnos como los hechos históricos pueden generar cambios a nivel personal y estudiantil, sin embargo, este ensayo no pretende ser una verdad, solamente es una mirada de las muchas que se les puede dar a este paso de la actividad a la pasividad estudiantil. Es una invitación a seguir profundizando en tan interesante tema, pues quedan millones de interrogantes dando vueltas ante su solución, tales como cambios urbanos que afectan al estudiante, o cambios en la organizaciones familiares, o como afecta todo el proceso de globalización de la sociedad, este acelerado crecimiento, el estrés social, y así hay muchos factores que pueden ser estudiados en torno a él.

Por lo tanto no hay que quedarse con esto, sino que hay que tomarlo, leerlo, analizarlo, criticarlo, y si se desea, pisotearlo para generar nuevos conocimientos y visiones para que, ojala algún día, se tenga una respuesta más clara y completa respecto a este tema, que nos converge a todos los estudiantes del hoy.



Referencias:

Bernasconi, A. & Rojas, F. (2003). Informe sobre la educación superior en Chile: 1980-
2003.
Santiago de Chile: IESALC / UNESCO.

Cifuentes, L. (1997). El movimiento estudiantil de la Universidad Técnica del Estado. La
reforma universitaria en Chile
.(pp.92-111). Santiago de Chile: USACH

Espinoza, O. (2005). Privatización y Comercialización de la Educación Superior en Chile:
Una visión crítica. Revista de la Educación Superior, XXXVI, 41-60.

Pérez, P. (2011). Motivación y Elección de la carrera universitaria. En Kuhne, W. & Pérez, P.
(Eds), Guía de apoyo psicológico para universitarios: Formación Integral y Autocuidado
(pp.85-94). Santiago de Chile: Vicerrectoría de Gestión y Desarrollo estudiantil,
Universidad de Santiago